La Educación es un tema recurrente en nuestras conversaciones, ¿no es así?. De una manera más pragmática, o en un plano más teórico, casi filosófico, abordamos esta cuestión, y muchas de las veces con las miradas contrariadas y circunspectas de las personas que se dedican en el día a día a educar a los pequeños y jóvenes, y, que saben muy bien, la tierra de nadie que hay que atravesar desde el ideal, a la práctica en las aulas.
A la vista de todos los ciudadanos está que no es un tema baladí, vemos como los políticos en su turno de gobierno aprovechan para darle una vuelta a las tan maltratadas Leyes de educación. Y es que, va a resultar que la educación nos procura una manera de ver el mundo, de actuar sobre él y de conformarnos en sociedad que muchas veces obviamos y es vital.
En nuestra colección, contamos con un corpus importante que aborda variados aspectos del tema. En este artículo, pretendemos destacar la literatura científica, que en los últimos años se ha editado en una línea divergente a la dirección generalizada que toma la educación en nuestro país.
La creatividad, la importancia de la educación emocional, los ritmos respetuosos para con los pequeños, el fomento de personas independientes y librepensadoras, la conciencia ecológica...
¿Moda? ¿Ideas nuevas?, la respuesta es un no, y me gustaría comenzar reseñando en primer lugar a Charles Fourier, pensador francés, socialista utópico, crítico con el capitalismo y la industrialización, con su libro visionario ¿Cómo educar para la libertad y la felicidad? (1825) (Errata Naturae, 2016).
Un siglo antes, tenemos el importante legado, para el desarrollo de la pedagogía moderna, de Jean-Jaques Rousseau con su clásico Emilio, o de la educación (1762) dónde expone su teoría pedagógica, cuya idea central gira en torno a ubicar al niño en el foco, en el centro del proceso educativo, teniendo en cuenta su propia naturaleza, y edad.
En las primeras décadas del siglo XX, destacamos a la pedagoga Maria Montesssori que se convirtió en el icono de una nueva pedagogía proponiendo una educación progresista en la búsqueda de la libertad, la autonomía y el respeto al niño. El libro de Renato Foschi, Maria Montessori (Octaedro, 2014) es una gran biografía sobre ella. En el aspecto práctico de la pedagogía contamos con diversos libros tales como Como obtener lo mejor de tus hijos: desarrolla sus capacidades y potencia su autoestima con el método Montessori, Tim Seldin (Grijalbo, 2007), Ayude a sus hijos a leer y escribir con el método Montessori de Lynne Lawrence (Paidós, 2001), 100 actividades Montessori, Ève Hermann (Planeta, 2017), entre otros tantos que te muestran la filosofía y la práctica de este método, para poder aplicarlo en el día a día.
A finales del siglo XIX, principios del XX, hemos de destacar también a Rudolf Steiner, pensador controvertido, que desarrolló una teoría pedagógica con la misión de "formar seres libres, capaces de impartir desde sí mismos propósito y dirección sus vidas". La primera escuela que fundó fue en la fábrica de cigarrillos Waldorf Astoria, para los hijos de los obreros. De ahí toma su nombre la pedagogía, que propugna el profundo respeto por el niño en todas sus facetas, la relación del mismo con su yo más íntimo, con la naturaleza, y las artes. Las ideas del filósofo austríaco quedan expuestas en su libro Pedagogía Waldorf: una educación hacia la libertad, Frans Carlgren (Rudolf Steiner, 2004).
Ya adentrados en el siglo XXI se sigue investigando acerca de la educación relacionándola con otras disciplinas que antes parecieran ajenas a ésta, como la neurología, así se acuñó el término neuroeducación; o la psicología, y son varios los especialistas en este campo que han dedicado parte de su investigación a la misma, como el doctor en Medicina y Neurociencia Francisco Mora con su título Neuroeducación (Alianza, 2013) en el que habla de la importancia de la emoción y la empatía, de la curiosidad, de los mecanismos de la atención, y del propio proceso cerebral del aprendizaje.
Ken Robinson, experto en educación y asesor, pone el peso de sus investigaciones en la importancia de la creatividad y el enfoque personalizado, lo deja patente en su libro Escuelas creativas (Grijalbo, 2015). Destaquemos también al tan aclamado Daniel Goleman con Triple focus: un nuevo planteamiento de la educación (Ediciones B, 2016) y Ecoeducación (Juventud, 2013) o S. -J. Blakemore con su título Cómo aprende el cerebro: las claves para la educación (Ariel, 2007)
En un mundo en el que el ritmo personal, y como sociedad viene dictado por el rendimiento económico, en el que tanto el trabajo como el ocio es gobernado por el impulso de producir y consumir, es, diría imposible, pararse a observar nuestra cadencia natural y menos la de los pequeños y jóvenes, que se ven abocados a ser participes de esta marea imparable. El caso, es que en el fondo del buen aprendizaje, tiene que haber calma, reflexión, y respeto por los diferentes caminos y tiempos de cada cuál, y tomar conciencia de que, cómo dice Antonio Muñoz Molina, "todo lo valioso tarda en aprenderse, por eso, son tan necesarios el sosiego y la lentitud, que también se aprenden", por tanto antes de adentrarnos en los conocimientos clásicos, deberíamos aprender ciertas cualidades, y en este sentido es recomendable el libro de Gianfracon Zavalloni La pedagogía del caracol o Educar en el asombro (Plataforma 2017) de Catherine L' Ecuyer.
Por último, no podemos dejar de citar, a tres conocidos pedagogos españoles, César Bona, profesor dedicadísimo a la tarea de educar con conciencia. Ha publicado varios libros, entre ellos La nueva educación (Plaza y Janés, 2015) y Las escuelas que cambian el mundo (Plaza y Janés, 2016). De otro lado, el filósofo y pedagogo José Antonio Marina, que ha desarrollado una gran labor investigadora y divulgativa en torno a la psicología, la lingüística y la educación, centrando muchos de sus esfuerzos en investigar sobre la inteligencia y los mecanismos de la creatividad. Tiene en su haber más de una treintena de libros, citamos aquí algunos de sus últimos títulos: Talento, motivación e inteligencia: las claves para una educación eficaz (Planeta, 2013), Objetivo: como generar talento: como poner en acción la inteligencia (Conecta, 2016) y El bosque pedagógico y cómo salir de él (Ariel, 2017).
Y Roser Batle, excepcional pedagoga y divulgadora, se vuelca en el trabajo con escuelas, con una propuesta educativa que combina procesos de aprendizaje y de servicio a la comunidad en la que viven los niños y jóvenes. Los participantes se forman trabajando sobre necesidades reales de su entorno, con el objetivo de mejorarlo. Como ella misma apunta, el niño más pequeño puede aprender, vivenciar y aplicar ese conocimiento, para la mejora de su comunidad. Tiene una amplia bibliografía práctica sobre como aplicar esta filosofía tan necesaria, destacamos de entre nuestra coleción Aprendizaje y servicio: como educar para la ciudadanía (Octaedro, 2007) o Cómo realizar un proyecto de aprendizaje y servicio: 11 ideas claves (Grao, 2015).
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