Jazz y Blues en viñetas

Los ancestros del cómic y del jazz comparten tiempo y espacio: EEUU del siglo pasado. Además de esta coincidencia en el espacio y el tiempo que les ha llevado a reflejar las inquietudes de cada momento, el cómic es un buen compañero para el jazz porque puede captar la plasticidad de la interpretación en directo y además narrar una historia - realidad ficcionada sobre los músicos y su música, o ficción que los necesita para enriquecerse y crecer-.

Si estáis pensando que lo ideal sería que los cómics tuviesen sonido y así se pudiese integrar la música en la narración, pues si, sería ideal y quizás no tengamos que esperar demasiado para que una experiencia así sea posible. Hasta entonces: 

 

JAZZ Y BLUES EN VIÑETAS

 

Dentro de las publicaciones puramente en formato papel os hablamos primero de aquellas que centran su atención en el jazz y terminamos con otras obras con alma de blues. Lo hacemos así porque el jazz bebe del blues y por eso están irremediablemente unidos. La selección no es exhaustiva, pero esperamos que sea lo suficientemente representativa e invite a explorar.

 

Nuestra primera parada es Billy Holiday de José Muñoz y Carlos Sampayo. Sampayo es un escritor y guionista argentino que además está especializado en jazz. Este trabajo sobre una de las diosas del jazz.

 

El siguiente título tiene autor francés. Christian Cailleaux y Hervé Bourhis son los autores del cómic sobre Boris Vian, Piscina molitor, en el que dan una visión de la vida de este poeta, escritor, dramaturgo y trompetista francés, padrino de la hija de Duke Ellington.

La fuga y Nocturno publicados por Barbara Fiore y dibujados por Pascal Blanchet. El primero es la historia de un músico ya anciano que recuerda su vida a través de la única constante que la ha unido: la música. 

Su particularidad es que no se utilizan para nada las palabras a lo largo de la narración. Por su parte Nocturno son tres historias paralelas se desarrollan en una sola noche en New York City en 1948, una noche calurosa de tormenta, entre melodías de jazz tres historias de soledad y de desesperación. Las ilustraciones, que al principio parecen una espléndida serie de portadas retro de The New Yorker, se encadenan melodiosamente y muestran una narrativa magistralmente lograda. Blanchet rinde un homenaje a la arquitectura de los años treinta a cincuenta del siglo xx, un homenaje al aerodinamismo, al movimiento streamline, representada con líneas puras, largas y curvas, los edificios con sus formas entrelazada y halls amplios y desmesurados incrementan la majestuosidad de los personajes. Nocturno es una novela gráfica dedicada a los que tienen miedo de la noche.

 

Acordes y desacuerdos de Regis Hautiere es otra buena muestra de que cómic y jazz o cómic y música casan muy bien.

 

Una ciudad, seis personajes, seis variaciones acerca de un tema, el de siempre: un hombre ama a una mujer que ama a un hombre que… El dibujo de estilo línea clara de Antonio Lapone nos introduce en el camerino del mundo del Jazz y del amor. Una novela gráfica imprescindible y elegante en extremo.

 

Finaliza el libro con un maravilloso cuadernillo a modo de sketchbook del autor donde nos muestra todo tipo de bocetos de personajes, pruebas de páginas a lápiz y color, propuestas alternativas de portada y un colofón final sorprendente. Nunca dejará de asombrarnos el poder echar un vistacito a la forma de trabajar y de pensar de nuestros autores más admirados.

Robert Crumb, padre del cómic underground americano, mostró siempre interés por este género, escribiendo para revistas e ilustrando desde postales a carátulas de discos. De hecho, se publicó una recopilación de todas las postales que había ilustrado bajo el nombre de R. Crumb’s heroes of blues, jazz and country que se vende conjuntamente con un CD de temas elegidos por él mismo y una biografía de cada músico.

 Con Bebop, Felipe Hernández Cava y Enrique Flores consiguieron el Premio al Mejor libro Ilustrado en Lengua Castellana de la Generalitat Valenciana 2000. Este es un álbum que pretende y logra con un guión, justo, bello y unos dibujos admirables llevarnos al ambiente, a la cultura, al tiempo que les tocó vivir a dos grandes del jazz: Chano Pozo y Chet Baker. Es la historia misma de dos hombres, de dos formas de vivir y entender su mundo.

El perseguidor es uno de los mayores logros literarios de Julio Cortázar y un clásico de la literatura del siglo xx. Con un trasfondo existencial magistralmente tratado, la historia describe los últimos días de Johnny Carter, virtuoso saxofonista cuya vida discurre al filo de la lucidez y la autodestrucción.

 

Desde su publicación en 1959, este homenaje de Cortázar al genial Charlie Parker ha conocido el fervor de numerosos lectores, que lo han considerado, como Rayuela, una experiencia iniciática. El gran ilustrador José Muñoz ha sabido interpretar con extraordinario talento la profundidad de esta ficción donde el jazz, las noches insomnes y el París de los años 50 son el marco de una historia incomparable.

Finalizamos la selección de cómic sobre jazz (aunque hay muchos otros) con Jazz Club de Alexandre Clerisse. Los Ángeles, 1966. Norman, músico de jazz profesional, se separa de Emily. En realidad, es Emily quien lo deja a él. Comienza así para Norman una larga huida hacia delante, por momentos dramática, a menudo extravagante, ante los interrogantes que se le plantean. ¿Que su música provoca la admiración de sus colegas y del público? Pues él está convencido de que ya no es capaz de tocar ni una sola nota interesante. ¿Que una noche se enrolla con una tía? Se trata de un secuestro planeado por una extraña secta. ¿Que consigue escapar y se reúne con sus amigos músicos? Es para embarcarse a su pesar en una gira europea. Cuando volvemos a saber de Norman en 1999, descubrimos a un artista de culto que vive aislado en el campo y está a punto de reencontrarse con Emily...

Ahora unimos con el género hermano el Blues y os hemos seleccionado:

The Bluesman es obra del tándem formado por el estadounidense Rob Vollmar y el leonés Pablo G. Callejo, pareja que ya había sido nominada en 2002 al Eisner al Mejor Número Único con The Castaways. Estos dos álbumes cuentan las aventuras de dos bluesmen que recorren Arkansas al principio del siglo XX. La religión, la vida vagabunda y el racismo son temas que se entretejen en este bello trabajo.

Love in Vain de Jean-Michel Dupont y Mezzo. Retrato del gran Robert Johnson, el bluesman que vendió su alma al diablo. Una biografía del artista maldito que consumió su vida con morboso frenesí, a base de mujeres, alcohol, mujeres, música y más mujeres, como si la supiera abocada a un brusco final antes de cumplir los treinta.

Un relato sin florituras, contando todo lo que se sabe de verdad sobre el artista que dejó una herencia inconmensurable en músicos como Bob Dylan o Eric Clapton, pasando por los Rolling Stones, Un viaje visual a la Norteamérica profunda de principios del siglo XX, realizado en un blanco y negro magistral y detallado, lleno de violencia contenida.

Siguiendo el retrato del gran genio del blues tenemos otro acercamiento con Avery’s Blues de Angux y Nuria Tamarit. Avery quiere ser un bluesman, pero no uno cualquiera, quiere ser el mejor bluesman de todos los tiempos. Avery fuma, bebe y se mete en peleas, lo que no hace bastante valiosa su alma para que el Diablo le conceda lo que desea. Sin embargo, acepta hacer realidad su sueño si le lleva un alma pura. En este camino hacia su destino, se encuentra con Johnny, que decide abandonar a sus ausentes padres alcohólicos y unirse a Avery en la búsqueda de un futuro mejor.

Para acabar con esta selección os dejamos otra joya como es O’Boys de Philippe Thirault

Un reparto de lujo para una historia endiablada como un solo de saxo.

 

El día que su hermano Snake desaparece río adentro, el joven Finn decide que debe escapar de su vida miserable. En apenas dos centenares de páginas, Colman, Cuzor y Thibault se marcan un intenso homenaje a algunos de los mitos fundacionales de la cultura sureña norteamericana. La leyenda de Robert Johnson, que vendió su alma al diablo en un cruce de caminos para convertirse en uno de los mayores bluesman del Delta del Misisipi, las aventuras de Huckleberry Finn por el río en compañía del negro Jim o, finalmente, la épica del vagabundo de ferrocarril que noveló Jack London en sus libros. Todo esto es O’Boys, contado con una asombrosa solvencia narrativa y un dibujo magistral.

Aquí os dejamos todas las referencias para que podáis disfrutar de estas joyas del cómic.

• Billie Holiday – ESPAÑOL Muñoz,José
• Piscina Molitar: La vida swing de Boris Vian – EUROPEO Cailleaux,Christian
• Nocturno y La Fuga – AMERICANO Blanchet,Pascal
• Acordes y desacuerdos – EUROPEO Hautiere,Regis
• Héroes del blues, del jazz y el country – AMERICANO Crumb,Robert
• Be bop – ESPAÑOL Hernández Cava,F.
• El perseguidor N-CORTAZAR,JULIO
• Jazz Club – EUROPEO Clerisse,Alexandre
• The bluesman – AMERICANO Bluesman 1-3
• Love in vain – EUROPEO Mezzo
• Avery’s blues – ESPAÑOL Angux
• O’Boys. EUROPEO Thirault,Philippe

Si quieres disfrutar con estas lecturas, ya sabes, puedes venir a la biblioteca, llamar al 969179700 o hacer tu petición a través de internet en Pide y Recoge

 

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