Cada año la Academia Goncourt, desde 1906, concede este premio a la mejor novela publicada en francés. En su origen, la dotación económica procedía de la herencia de los hermanos, una cuantía de cinco mil francos, a día de hoy está vacío de contenido económico, se trata de un cheque simbólico de 10 euros. El verdadero premio son las ventas, que suelen estar en torno a los 100.000 ejemplares y con traducciones a una decena de lenguas, así como adaptaciones al cine, como La encajera de Pascal Lainé llevada al cine por Claude Goretta (1977) o la más reciente: Nos vemos allá arriba (2017) de Albert Dupontel, adaptación de la novela homónima de Pierre Lemaitre, Premio Goncourt de 2013.
La lista de escritores premiados nos hace un recorrido por la literatura francesa del siglo XX, desde Marcel Proust en 1919 con A la sombra de las muchachas en flor, segundo volumen del ciclo En busca del tiempo perdido, Los mandarines de Simone de Beauvoir (1954), Marguerite Duras con El amante (1984) o Me voy de Jean Échenoz en 1999.
En un momento dado el premio se abrió a autores francófonos no nacidos en Francia como Amin Maalouf con La roca de Tanios (1993), Jonathan Little con Las benévolas (2006) o la más reciente y extremecedora Canción dulce, en 2016, de Leila Slimani. Tampoco los premios han dejado pasar al l'enfant terrible de su literatura, Michael Houllebecq con El mapa y el territorio en 2010, novela fascinante que gira en torno al arte.
Si nos detenemos en los últimos libros premiados hablaremos de Pierre Lemaitre con Nos vemos allá arriba en 2013, un auténtico fenómeno editorial. Novela apasionante, ambientada en el final de la Gran Guerra, que comienza con un incidente pocos días antes del armisticio. El teniente d'Aulnay-Pradelle ordena una absurda ofensiva que culminará con los soldados Albert Maillard y Édouard Péricourt gravemente heridos, y con sus vidas ligadas para siempre, una historia trepidante, un mosaico de vidas emocionante, y de gran maestría, conjugando drama y humor a través de sus páginas. Es la primera de la serie: Los hijos del desastre, le seguirán Los colores del incendio y El espejo de nuestras penas
Unos años después en 2015 el premio será otorgado a Mathias Enard por Brújula obra que cuenta la historia de una cofradía orientalista, está narrada en primera persona, y se adentra en los recuerdos de niñez del autor a través de su protagonista Franz Ritter.
En 2017 será Éric Vuillard quién tenga el honor de recibir el Goncourt con su libro El orden del día, relato austero e intrigante, enmarcado en Alemania, concretamente en febrero 1933, cuando tuvo lugar en el Reichstag una reunión secreta que no figuraba en el orden del día, en la que industriales alemanes entre los que se encontraban los dueños de Oppel, Krupp, Siemens, Bayer, Telefunken, IG Farben, Agfa y Varta, donaron grandes sumas de dinero a Hitler para conseguir la estabilidad que prometía. Vuillard vuelve a estar de actualidad con su último libro La guerra de los pobres.
En 2018 se alza con el premio el libro Sus hijos después de ellos de Nicolas Mathieu, esta novela se inicia en el verano de 1992, el protagonista es Anthony, un chaval de catorce años, con un padre desempleado debido a la desindustrialización que sufre la zona. Un día, en el lago de la ciudad junto a su primo roba una canoa par ir a la playa nudista que otean desde la orilla. Es una novela en la que está muy presente la adolescencia en todas sus facetas, y la frustración por el deseo de una vida mejor.
El último ganador, tras batirse entre otros con Amélie Nothomb, ha sido Jean-Paul Dubois con su novela Todos los hombres no viven en el mundo de la misma manera (2019) historia cuya trama gira en torno a Paul Hasen, conserje y vigilante en el edificio Excelsior, y Horton, un Ángel del Infierno. Ambos se encontraran, y compartirán relato cuando entran en prisión.
Ya sabes, todos ellos en tu Biblioteca
Comentarios
Publicar un comentario
Deja un comentario a este post