Análisis de la IX Sinfonía de Beethoven en el Taller de pensamiento

      Beethoven pensaba que con la música también se podían expresar ideas. Su Novena Sinfonía es como un debate entre la alegría, como ayuda para superar los obstáculos de la vida, y el temor a la fatalidad del destino, al mismo tiempo que una reflexión sobre la relación entre la alegría y la fraternidad humana. Wagner decía que esta Sinfonía era una lucha, de aspecto grandioso, entre las aspiraciones del alma a la alegría y la opresión de la fatalidad (lo que fue muy presente en la vida desdichada de Beethoven desde su infancia: padre alcohólico, le pegaba para que tocase, madre triste, dificultades económicas, barreras de clase social para sus pretensiones amorosas, sobre todo la sordera, genio muy difícil, dificultades con sus hermanos y con su sobrino...)
            Un resumen rápido podría ser el siguiente. La sinfonía tiene 4 partes o movimientos. En el primer movimiento el alma es presa de la angustia y la tortura de la duda y de la fatalidad. En el segundo movimiento para escapar de los tormentos, el hombre se sumerge en el torrente de las pasiones sin tregua y en los placeres. Pero esto no basta, por eso en el tercer movimiento se dedica a la meditación sobre la vida, pero con una cierta melancolía. El cuarto empieza con una recapitulación de los anteriores. Después presenta una batalla entre la fatalidad/sufrimiento y la alegría. Como parece que la alegría no puede vencer, aparece la voz humana para, con las palabras del poema de Schiller, luchar por la alegría, basada en la hermandad humana y en la esperanza en Dios. Cada vez más la palabra se apodera de la música para indicar el triunfo de la alegría.

Comentarios